AL VUELO | La norma que elimina la detención preliminar cuando no hay flagrancia, que aprobó el Congreso al caballazo, comienza a traer problemas. Las críticas no se han hecho esperar. Es el caso del saliente presidente del Poder Judicial, Javier Arévalo, quien reconoció que los jueces pueden decidir si inaplicar la norma si consideran que va contra la Constitución. En tanto, el vocero de la Fiscalía, Víctor Cubas, señaló que el Ministerio Público presentaría una demanda de inconstitucionalidad contra la norma. Y hasta el presidente de la Comisión de Fiscalización del Legislativo, Juan Burgos, criticó la autógrafa de ley y advirtió que beneficiaría a investigados como Nicanor Boluarte.