Janet Tello y otros cuatro magistrados serán procesados disciplinariamente por la JNJ. Un procedimiento de lo más oportuno, justo cuando la actual presidenta del Poder Judicial mantuvo una postura firme en rechazo a las leyes del Congreso y al accionar del gobierno de Dina Boluarte. A Tello y a los demás magistrados se les acusa de haber emitido de forma irregular una sentencia el 19 de julio de 2024 contra Julio Cadenillas, ex coronel de la PNP, quien denuncia que no se le permitió apelar la decisión ante la Corte Suprema y que, por una “motivación defectuosa” , rechazaron su recurso de casación.
El caso estará a cargo del presidente de la JNJ, Gino Ríos Patio y, como para calmar las aguas, el pleno de la JNJ ha aclarado que el proceso “no constituye adelanto de criterio sino, por el contrario, tiene el propósito de determinar, en estricto respeto de la presunción de licitud, si los hechos configuran o no una inconducta funcional”.
Ahora, tanto Tello como los demás magistrados tienen hasta 10 días hábiles para presentar sus descargos por escrito. ¡Qué situación más conveniente!
El año pasado, el Congreso intentó vendernos la reelección de alcaldes y gobernadores dentro de un paquetazo que también incluía la desaparición de los movimientos regionales. El proyecto no pasó la valla de la segunda votación y terminó en el archivo, pero los otorongos no se rinden.
El congresista Luis Gustavo Cordero Jon Tay, de la bancada Somos Perú, ha presentado un nuevo Proyecto de Ley para insistir con la reelección de alcaldes distritales, provinciales y gobernadores sí o sí. Una iniciativa que, por supuesto, cuenta con el respaldo de gobernadores como el viajero petipan Acuña.
La polémica radica en que, según sus defensores, la reelección permitiría a las autoridades locales culminar proyectos a largo plazo en beneficio de la población. Sin embargo, sus críticos advierten que, en la realidad peruana, esto solo garantizaría que la corrupción siga siendo el pilar de las gestiones.
Los congresistas que apoyan la medida dicen que “sería el pueblo quien decida si estas autoridades vuelven o no al cargo”, pero convenientemente olvidan que la necesidad y unos cuantos morlacos pueden garantizar los votos necesarios. Si no, pregúntenle a Oscorima, que ya repitió el plato tres veces…
Ministro del Interior asegura que quienes firman moción para interpelarlo es porque no conocen su trabajo
Juan Santiváñez, el ministro del Interior que parece haberse graduado como coach, asegura que los 32 congresistas que firmaron la moción de censura en su contra lo hacen “sin conocimiento”. Claro, ¿cómo osan cuestionar su gestión si él tiene una “estrategia clara” contra la delincuencia? Eso sí, los 268 homicidios registrados bajo su mando deben ser solo una anécdota estadística. Susel Paredes, líder de la cruzada antipopular (según Santiváñez), necesita una firma más para que el Congreso decida si el ministro vive en un universo paralelo o simplemente actúa a espaldas de todos y solo para sus propios intereses.
Mientras tanto, Santiváñez, desde Chiclayo, reparte lecciones de humildad: “Respeto al Congreso, pero ellos no saben lo que hacen”. ¿Ironía? La moción avanza, y con cada homicidio, su discurso suena más a stand-up comedy.